Recién llegué a los 26 años de edad y me gustaría hacer énfasis en algunas lecciones que he aprendido en ese tiempo: Los cumpleaños están sobrevalorados. El día más común puede ser el mejor de tu vida. N o siempre vas a obtener lo que quieres. No importa cuánto lo desees. Si no es el momento adecuado, no lo tendrás. Lo único que puedes controlar es tu actitud hacia la vida. Ni tu salud, ni tu carrera, ni tus sentimientos. Tu actitud. Tienes los amigos que te mereces. Recibes lo que das y sólo tú sabes qué aceptar. El peso perfecto no existe así como tampoco. Tus posesiones no hablan de quien eres si no de tu grado de inseguridad y administración monetaria. Si te conoce desmaquillada, olorosa, avergonzada y aún así sigue ahí, lo logró. Si estando desmaquillada, olorosa y avergonzada te sigues sintiendo hermosa. Lo lograste. Una amiga nunca tira mala vibra. Ni entre líneas o bromas. Si tienes un talento no lo dejes de lado, o cada día te costará más recordar porqué lo ...